“No es un intento por ser divertida. Cuando las personas hacen ese comentario me siento realmente ofendida”, explica Billie Eilish en su entrevista con David Letterman en Netflix.
Billie Eilish es una de las artistas pop alternativas más influyentes del momento. Con tan sólo 20 años ha recibido 17 nominaciones y 7 premios Grammy, destacando como compositora y directora, siendo ganadora de un Óscar por mejor canción original en la película No Time To Die.
La autora de grandes éxitos como Bad Guy ó Happier Than Ever, ha destacado por su originalidad y honestidad como artista; mostrando abiertamente su vulnerabilidad como persona. En su entrevista My Next Guest Needs No Introduction, con David Letterman; nos comparte cómo ha sido para ella vivir con un diagnóstico de Tourette desde sus 11 años.
A pesar de que en la entrevista el tema del síndrome es corto, la artista nos cuenta cómo ha aprendido a lo largo de los años a vivir con su condición, cada vez aceptándose aún más, pero aún así buscando que no sea el tema principal en su carrera, ni mucho menos en su vida.
El síndrome de Tourette es un trastorno del sistema nervioso, el cual provoca que las personas produzcan sonidos o movimientos repetitivos e involuntarios de manera esporádica. Como lo platicamos en artículos anteriores, cada persona experimenta su condición de maneras distintas, y la relación que se tiene con esta para cada persona es muy diferente.
Para Billie, el Tourette se presenta en su vida como tics cotidianos, que según ella, a simple vista pueden no llegar a notarse por las personas que la rodean.
“Son cosas que nunca notarías si estuvieras manteniendo una conversación conmigo, pero para mí son muy agotadoras”, explica.
Sin embargo, nos platica que cuando estos sí son notorios, las personas suelen hacer comentarios como “¿estás bien?”, “¿pasa algo?”, o incluso, al desconocer, llegan a asumir que lo hace por “hacerse la cómica”. Esto es algo que la ha hecho sentir increíblemente ofendida, ya que para ella no ha sido fácil lidiar con ello. Por eso mismo, no busca que las personas la recuerden por ello, nos cuenta que ahora ha logrado entender que el síndrome de Tourette no la define, y que tampoco tendría por qué limitarla a hacer lo que más ama, la música y el escenario.
Conocer la historia de una de las artistas más exitosas en los últimos años, Billie Eilish, es un gran referente para todos. Podemos darnos cuenta de que no hay condición, síndrome o discapacidad que nos pueda detener a hacer lo que queramos. Así que no tengamos miedo de lanzarnos, de mostrarnos siempre vulnerables y auténticos con lo que somos, tal como nos lo ha demostrado Billie Eilish.
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