Por: Iris Axalco
Instagram
es una red social usada en su mayoría para fotografías y contenido audiovisual
donde los usuarios pueden interactuar o las empresas pueden darse a conocer, pero
existe una cuestión un tanto inquietante y es que hay numerosas opiniones y
artículo que mencionan la relevancia de los estándares que se han normalizado
gracias a esta red social y que impactan en lo referente a lo físico y lo
convierte en un motivo de segregación, como dice De Souza:
Se asume que existen normas y
convenciones (estéticas, comportamentales, sexuales y otras) consideradas
válidas en el entorno social, con las cuales se alejan a los “diferentes”. Todo
eso, pues prevalece un estigma que separa a las personas; y la imagen corporal
tiene un rol relevante en esa realidad (Goffman, 1993; De Souza Godinho, 2016
en De Souza, S. Et al., 2019)
Así pues “los individuos son guiados por patrones
preestablecidos, y muchas veces, no dejan un espacio para aquellos que no se
encuadran en una estética determinada” (De Souza, S. Et al., 2019). Pero ¿cómo
se relaciona esto directamente con las personas con discapacidad? recientemente
me he encontrado con otros varios títulos en los motores de búsqueda que dan
bastantes puntos a favor de lo que son las redes sociales, Instagram hablando
más puntualmente, en lo respectivo a cómo ayudan a mejorar las interacciones y
relaciones sociales de las personas con discapacidad, lo cual me parece una
situación relevante para analizar y reflexionar; no obstante, por el momento
decidí no centrarme en este aspecto sin antes explorar lo que Instagram tenía
para mí partiendo desde mi propio motor de búsqueda dentro de esta red social;
así pues, he decidido recurrir a los famosos hashtag (#) y navegar por las
fotografías, publicidad y videos que son colocados inicialmente al buscar
#Discapacidad, con el objetivo de analizar qué imágenes, perspectivas y quiénes
son los emisores de dichos mensajes para que el público conozca sobre la
discapacidad.
574 mil publicaciones.
Esta cifra por si sola podrá sonar como que cuenta con un
contenido abundante, y cabe mencionar que a primera vista predominan las
publicaciones con fotografías de logros en ámbitos como deportivos, médicos,
etc. que han tenido fundaciones o instituciones que trabajan con personas con
discapacidad, así como publicaciones con frases, experiencias y contexto sobre
qué es la discapacidad; no obstante, decidí hacer una exploración también al
#tendencias, que cuenta con nada más y nada menos que 10.2 millones de publicaciones, para ver si alguno de los
contenidos sobre discapacidad era arrojado en esta categoría, y ciertamente no
logré encontrarlos.
Claramente hay una diferencia significativa entre lo que
son tendencias, que se centran principalmente en el “bienestar” físico y
cuidado de la imagen, mostrando ropa, calzado, maquillaje y un estilo de vida
saludable, convirtiendo y priorizando así el cuerpo como inversión, pero
dejando de lado la diversidad de la inclusión, la consciencia de que existen
otros estilos de vida fuera de las pantallas, por supuesto no negaré que las
redes sociales abren las puertas a nuevas posibilidades de interacción y
difusión de información, pero ¿qué es lo que se prioriza? ¿qué es lo que
nosotros priorizamos? ¿qué es lo que queremos ver? Y ¿por qué?
Referencia
Selediana De Souza
Godinho y Adilton Cícero Nogueira da Silva (Agosto, 2019). La percepción social
de la discapacidad en Instagram. XIII Jornadas de Sociología. Facultad de
Ciencias Sociales, Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires.
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