Imagen 1. Un grupo diverso de personas participa en una clase de expresión corporal en un salón de danza con espejos. Cada persona realiza diferentes movimientos con las manos y expresiones faciales intensas, mostrando concentración y emoción. Se observa a una persona con gafas y sudadera lila, otra con suéter beige y cabello corto, un joven con suéter negro y una mujer con camiseta rosa. El ambiente refleja inclusión y creatividad en un espacio donde todas las personas pueden expresarse libremente.
La danza es mucho más que movimientos coordinados al compás de la música. Es una forma de expresión que trasciende límites físicos y sociales, permitiendo que la diversidad se convierta en una fuente de creatividad y bienestar. En este blog exploramos cómo proyectos innovadores y la pasión por el baile están abriendo caminos para que personas con discapacidad se expresen, se sientan libres y, sobre todo, disfruten del placer del movimiento.