Algunos atletas olímpicos que adquirieron discapacidad han continuado sus carreras en los Juegos Paralímpicos, demostrando un espíritu de superación y perseverancia admirable.
George Eyser: Este gimnasta estadounidense compitió en los Juegos Olímpicos de 1904 con una pierna de madera y ganó seis medallas, incluyendo tres de oro.
Neroli Fairhall: Arquera neozelandesa que se convirtió en la primera atleta parapléjica en competir tanto en los Juegos Olímpicos como en los Paralímpicos. Ganó oro en los Juegos Paralímpicos de Arnhem en 1980 y luego compitió en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles en 1984.
Paola Fantato: Esta arquera italiana fue la primera en competir en ambos Juegos en el mismo año, durante los Juegos de Atlanta en 1996.
Natalia Partyka: Tenista de mesa polaca que ha competido en múltiples Juegos Olímpicos y Paralímpicos, ganando medallas en ambas competiciones.
Oscar Pistorius: Corredor sudafricano con amputaciones bilaterales que compitió en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, además de haber ganado múltiples medallas en los Juegos Paralímpicos.
Estos atletas no solo han roto barreras en el deporte, sino que también han servido de inspiración para muchos otros, demostrando que con determinación y esfuerzo, los límites pueden superarse.
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